La Federación de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) ha acordado la suspensión de una cuarta parte de su plantilla, compuesta por 30 personas. La patronal alimentaria planea realizar el recorte con acuerdos voluntarios con los trabajadores. La medida, justifica la dirección, ha sido adoptada ante la falta de recursos de la organización. Una falta vinculada a la cuantiosa indemnización tras la salida de su anterior secretario general.
Los problemas en la patronal alimentaria tienen su origen, en parte, en el despido improcedente el pasado año del secretario general Horacio González por el actual presidente Pedro Astals, que costó más de medio millón de euros. A ese gasto se suma el descenso de ingresos por cursos, la caída de las ayudas públicas y la dificultad para elevar las cuotas ante la existencia de posiciones enfrentadas en la propia organización. Los grupos multinacionales tratan de imponer sus tesis mientras las pymes, mayoritariamente españolas, piden protagonismo.
Fuente: elpais.com