España ha perdido 26 puestos y ha caído hasta la posición 55 del mundo en seguridad en la jubilación por la debilidad de su economía y el deterioro del bienestar de la población, según el Índice Mundial de Jubilación 2015 elaborado por Natixis Global Asset Management a partir de datos de 150 países.

El alto nivel de paro en España, el descenso gradual de la renta per cápita, la debilidad de los balances de los bancos y el aumento de la deuda pública han creado, según Natixis Global AM, un contexto menos favorable para los jubilados españoles.

Aunque España ocupa una buena posición en salud y calidad de vida durante la jubilación, actualmente se encuentra entre los últimos países en bienestar material, es decir, en lo que se refiere a la capacidad de los jubilados para vivir con comodidad en términos monetarios.

No obstante, con la recuperación económica a la vista, el informe señala que las perspectivas para España son positivas, lo que contribuirá a mejorar la situación de los jubilados en los próximos años.

«La economía crecerá el próximo año, lo que podría empezar a traducirse en un aumento del empleo, los ingresos y la recaudación tributaria (…) Una economía más fuerte podría impulsar aún más el consumo y la confianza empresarial, lo que a su vez podría acelerar el crecimiento y estabilizar los niveles de bienestar de los jubilados españoles», subraya la directora general para Iberia y Latinoamérica de la firma, Sophie del Campo.

Este índice mundial tiene en cuenta 20 indicadores agrupados en cuatro categorías: ingresos y finanzas personales, salud y calidad de la sanidad, factores medioambientales, y factores socioeconómicos.

Muchos países europeos continúan disfrutando de una mayor seguridad financiera durante la jubilación y copan ocho de los diez primeros puestos de este indicador. Suiza y Noruega se sitúan en cabeza, seguido de Australia, Islandia, Holanda, Suecia, Dinamarca, Austria, Alemania y Nueva Zelanda.

Según Natixis Global AM, los países con menor seguridad durante la jubilación se encuentran en las zonas en desarrollo del África subsahariana, Oriente Medio y Sudeste Asiático.

Fuente: EUROPAPRESS